“Sus viejas guerras andan por el verso,
que es la única memoria. El universo
Las siembra por el norte y por el Sur.
En la espada persiste la osadía
de la diestra viril, hoy polvo y nada;
en el hierro o el bronce, la estocada
que fue sangre de Adán un primer día.
Gestas he enumerado de lejanas espadas
cuyos hombres dieron muerte
a reyes y serpientes. Otra suerte
de espadas hay, murales y cercanas.
Déjame, espada, usar contigo el arte;
Yo, que no he merecido manejarte.”